La inteligencia artificial es uno de los últimos pasos que está dando el desarrollo tecnológico en el sector inmobiliario. Ya hemos visto cómo el Big Data, el Internet of Things o la realidad virtual cuentan con empresas y startups que están detrás de ellos para hacer cada vez más eficiente a este sector. Ahora le ha tocado a una de las materias más novedosas, no solo para el sector de la vivienda, como es la inteligencia artificial.
Qué es la Inteligencia Artificial
Una definición sencilla de Inteligencia Artificial (AI por su siglas en inglés) es la de aquella tecnología que imita las funciones cognitivas humanas de forma simulada. Es decir, es una tecnología que tiene la capacidad de aprender y resolver problemas, ejerciendo un razonamiento casi humano.
Constantemente escuchamos avances en esta materia como la adquisición de la capacidad de hacer diseño creativo de una Inteligencia Artificial, o cómo esta tecnología ha sido capaz de ganar al mejor jugador de ajedrez con su razonamiento. Poco a poco la inteligencia se va desarrollando más y su aplicación se va extendiendo a diversos sectores.
Los ejemplos más conocidos y cotidianos de Inteligencia Artificial son por ejemplo el Siri de Apple o el Cortana de Microsoft. Empresas como Facebook y Amazon también la usan para sus negocios. Pero también podemos encontrar aplicaciones de inteligencia artificial en otros sectores como el de las finanzas, la industria pesada o la aviación. Y ahora también en el sector inmobiliario.
Aplicaciones de la Inteligencia Artificial en el sector inmobiliario
El campo de la Inteligencia Artificial es tan amplio, que en el sector inmobiliario se está introduciendo esta tecnología para distintas aplicaciones y ámbitos:
Valoración de inmuebles
Esta es una de las primeras aplicaciones que la Inteligencia Artificial ha tenido en el sector inmobiliario, pues se viene aplicando desde hace unos 15 años (aunque evidentemente no con el mismo nivel de desarrollo con el que cuenta actualmente). Con esta tecnología se trata de evitar los errores que se producen por la intervención humana en la valoración de inmuebles. En la actualidad el desarrollo de esta materia se centra en la aplicación del sistema RNA, que reproduce a pequeña escala las funcionalidades del cerebro humano. No obstante, aunque la Inteligencia Artificial ya permite obtener valoraciones de inmuebles metiendo variables sencillas (número de habitaciones, metros cuadrados, ubicación), de momento este sistema se utiliza como complemento al criterio humano del valorador, sin sustituirle. En este campo la empresa Noteges es el referente español.
Portales inmobiliarios:
Una de las aplicaciones más novedosas de la inteligencia artificial es la utilizada en los portales inmobiliarios para el análisis de esos millones de imágenes que almacenan, donde utilizan la AI para generar de forma automática descripciones y etiquetas. Esta aplicación, a parte de ahorrar mucho tiempo en esta tarea, permite hacer una clasificación del contenido mucho más eficiente que la se genera cuando se deja en manos del usuario final. Una de las startups que está detrás de esta idea es la española Restb.ai, que ha desarrollado una API para que los portales inmobiliarios puedan aplicar esta tecnología a sus bases de datos.
Visitas a viviendas:
Según afirma Proptech.es, otra de las aplicaciones de la Inteligencia artificial en el sector inmobiliario pasa por resolver la ineficiencia que supone el actual sistema de visitas a viviendas. Para ellos “es imprescindible tener herramientas que encuentren las propiedades concretas que buscamos entre toda esa maraña de webs y que las seleccione en base a unas pautas que le digamos, como pueden ser la ciudad, barrio, precio, metros cuadrados, transporte público, etc”.
Monitorización virtual de obras:
Uno de los grandes avances que ha vivido la gestión de los proyectos de construcción ha sido la aplicación de la inteligencia artificial para la monitorización del avance de las obras de construcción. Esta aplicación permite hacer previsiones sobre la viabilidad de un suelo, los desvíos de plazos o la posibilidad de que surjan sobrecostes asociados al proyecto. Todo ello gracias al procesamiento de grandes volúmenes de información. Una de las empresas pioneras en esta materia es la plataforma de Sofía RTD, con la que se están gestionando ya granes proyectos de construcción a nivel internacional.
Como se ve, la aplicación de la inteligencia artificial en el sector inmobiliario está abarcando ámbitos muy diversos dentro del sector, pero en todos ellos supone un gran avance en la búsqueda de la eficiencia y el crecimiento del amplio mundo de la vivienda.